Un 25 de Enero de 1995, en un partido de fútbol de la Premier League inglesa entre Manchester United y Crystal Palace, el francés Eric Cantona le pegaba una patada voladora a un hincha, Matthew Simmons, que lo insultó tras ser expulsado.
Simmons, usual frecuentador de reuniones de las facciones de ultraderecha National Front y British National Party con un prontuario de violencia que incluyó agredir a un DT de fútbol que lo llamó "basura Nazi" (Nazi scum), insultó a Cantona por su condición de extranjero.
El abuelo materno de Cantona nació en Barcelona, España, y supo luchar contra las fuerzas del dictador Francisco Franco durante la Guerra Civil española, antes de verse obligado a irse a Francia traa la victoria de Franco.
Años más tarde, en una entrevista dada a la BBC, consideró este hecho el más sobresaliente de su carrera. "Patear a un fascista no se saborea todos los días. Es un sueño para mucha gente, así que lo hice por ellos. Me arrepiento de no haberle pegado más fuerte", llegó a decir Cantona un tiempo después.